La cebolla es una planta herbácea de ciclo anual o bianual, dependiendo de las condiciones climáticas. Existen variedades tempranas, de media estación y tardías, cosechándose desde finales de abril, hasta después de verano, estas últimas son las que se conservan mejor. Prefiere suelos bien drenados, no demasiado húmedos y de poca acidez. Resiste el frío pero necesita altas temperaturas en la fase de formación y maduración del bulbo.
La col – repollo es una planta bianual con un crecimiento lento de gran adaptabilidad climática, aunque su cultivo se da mejor en las zonas húmedas. Su producción se concentra principalmente a partir de los meses de invierno hasta el verano.
La coliflor es una planta anual de crecimiento rápido, de 2 a 6 meses, según el ciclo sea corto, medio o largo dependiendo, en cada caso, de las variedades y de las condiciones meteorológicas. Su producción, al igual que la col, se concentra principalmente desde los meses de invierno hasta el verano, y cada vez más están irrumpiendo en nuestro mercado variedades híbridas con una inflorescencia más compacta y reducida, lo que conlleva a una mayor productividad y mejor aceptación por parte del consumidor.
La espinaca es una planta herbácea anual, que a pesar de considerarse una planta de primavera, en climas benignos como el nuestro, crece muy bien durante el otoño e invierno. Su fase productiva comienza con el crecimiento vegetativo, finalizando con la subida a flor, realizándose la recolección de forma manual y en varias fases.
La fresa es una planta herbácea vivaz, de la familia de las rosáceas, de climas frescos aunque también existen variedades adaptadas a zonas cálidas.
La habichuela es una planta herbácea anual de climas cálidos, tallos delgados, hojas trifoliadas, con pequeñas estípulas en la base del peciolo e inflorescencias que se sitúan en racimos terminales o axilares, según sean variedades enanas o de enrame.
La lechuga es una planta anual de crecimiento rápido, de 2 a 6 meses, según el ciclo, dependiendo, en cada caso, de las variedades y de las condiciones climáticas. Aunque se adapta a una gran variedad de climas, en general prefiere los templados y húmedos, siempre teniendo en cuenta que la temperatura juega un papel muy importante en el acogollado y en la floración.
El limón, al igual que el naranjo, es un árbol subtropical, de hojas algo más grandes, perteneciente a la familia de las Rutáceas, puede alcanzar los 4-5 metros de altura, es de porte abierto y suele presentar espinas en sus ramas. Su explotación industrial se inició en 1.849 en California como consecuencia de satisfacer la deficiencia de vitamina C entre la población.
La mandarina es el fruto de los mandarinos, arbustos o pequeños árboles de 2-4 m. de altura con ramas delgadas, que presentan, entre los cítricos, la mayor resistencia al frío.
El mango es un árbol tropical de copa densa y de buen desarrollo, presente en la mayoría de los países tropicales. Las hojas son estrechas, aovadas, y puntiagudas, pecioladas, alternas, de color pardo rojizo en la juventud y verdioscuras y ásperas en la vejez. Las pequeñas flores forman copiosas inflorescencias (hasta 5000 flores juntas). Sólo una milésima parte de estas flores llegan a la madurez.
